Es un enclave fundamental en la ruta imperial por la que el emperador Carlos V viajó a su retiro en el Monasterio de Yuste.
Existe una antigua calzada romana de la que aún hoy pueden verse los restos.
Ubicado en la localidad de Cabezuela del Valle, dentro de la Reserva Natural Garganta de los Infiernos. Desde él podemos observar unas vistas magníficas de la cascada del Manto de la Virgen.
Junto a sus excepcionales vistas encontraremos un agradable refugio (sobretodo en verano) y paneles sobre la fauna y flora de la zona.
Existe una gran piedra gigante justo a la derecha de uno de los paneles interpretativos y se recomienda no subir a hacerse fotos encima de ésta por el riesgo de caída.
Aparcaremos el coche en el aparcamiento junto al Centro de Interpretación de la Garganta de los Infiernos y cogeremos el sendero señalizado que nos lleva a los Pilones.
El mirador del chorrero de la virgen lo dejaremos a la derecha (es recomendable visitarlo) y seguiremos recto por un camino empedrado.
El comienzo del camino es lo más complicado, dado que tenemos que ganar altura. El resto de la ruta es llanear con varios sube y bajas hasta llegar al mirador.
La ruta es frecuentada diariamente y está muy bien señalizada en todo momento.